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El 60% de los españoles sigue pagando en efectivo
6 mayo, 2024
El pago con tarjeta o con el móvil se resiste en España, con un 60% de ciudadanos que utiliza principalmente dinero en efectivo, según un estudio del Banco de España recogido por la Universitat Oberta de Catalunya (UOC).
Asimismo, el 65% de los españoles asegura que pagó en efectivo a diario a lo largo del año pasado. Del mismo modo, pese a que la pandemia de COVID-19 disparó el uso del pago digital, por la recomendación de evitar el dinero en efectivo, este ha vuelto a ganar terreno.
«El efectivo se recuperó después del coronavirus. La mayoría de los ciudadanos volvieron al sistema de pago que utilizaban antes de la pandemia«, ha afirmado Elisabet Ruiz Dotras, profesora de los Estudios de Economia y Empresa e investigadora del grupo DigiBiz de la UOC.
Por otro lado, la experta ha apuntado que España no tendrá como prioritario el pago digital hasta que se cree el euro digital. «La pandemia fue un primer paso, pero el definitivo tendrá lugar cuando convivan el euro digital y el físico, y cuando las empresas paguen las nóminas con euros digitales. Esto provocará que los pagos también sean digitales y no se pueda sacar dinero en efectivo», ha declarado Ruiz.
No obstante, desde la pandemia, prácticamente todos los comercios cuentan con datáfonos, y la mayoría ha eliminado el gasto mínimo para pagar con tarjeta o móvil. En este sentido, Ruiz ha señalado que «las comisiones que los bancos cobran a los establecimientos por el uso de datáfonos también han bajado, lo cual provoca que los comercios sean proclives a usar este sistema de pago».
La edad y el nivel de estudios determinan la forma de pago
Además, mientras que el 76% de los mayores de 65 años paga habitualmente con dinero en efectivo, esta cifra baja hasta el 36% entre los jóvenes de 25 a 35 años. Sin embargo, cuando el importe es elevado, las personas mayores optan por la tarjeta.
También, el 74% de los españoles con estudios de primaria opta de forma predominante por el pago en efectivo, mientras que esto solo se cumple en el 44% de las personas con estudios superiores. «Los que tienen un nivel de estudios más bajo eligen los billetes y monedas por desconfianza de las nuevas tecnologías«, ha comentado Ruiz.
Por otra parte, quienes viven en ciudades grandes y en pueblos sin cajeros automáticos pagan con tarjetas o aplicaciones porque no les queda otra opción.
En esta línea, Enric Soler, profesor colaborador de los Estudios de Psicología y Ciencias de la Educación de la UOC, ha destacado que «hemos pasado de las clásicas esquinas con grandes oficinas bancarias a cajeros ATM diminutos, que además, a la hora de sacar dinero, cobran comisiones. Esto es un problema añadido para obtener efectivo y dificulta la utilización del dinero físico».
Ventajas y desventajas de ambas formas de pago
En relación con las ventajas y desventajas de cada forma de pago, Soler ha apuntado: «La facilidad que supone pagar con tarjeta o con el móvil hace que sea más difícil ser consciente de la cantidad de dinero que gastamos. La conducta de pagar virtualmente es automática, y eso puede ser un factor de riesgo importante para acabar realizando compras compulsivas«.
«Hacemos el mismo gesto para pagar un café que un gran electrodoméstico. En cambio, cuando pagamos en efectivo, tomamos mucha más consciencia del dinero gastado porque lo tocamos, lo contamos y vemos como se va de las manos», ha agregado Soler.
Por su parte, Ruiz ha agregado que «si pagamos con billetes y monedas, salvo que guardemos todos los tickets, no sabemos la cantidad que gastamos durante un mes. En cambio, si pagamos digitalmente, sí. Y, además, vemos en qué hemos gastado el dinero».
*Para más información: https://www.uoc.edu/ https://www.bde.es/
06.05.2024
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