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El gasto en bienes de consumo tecnológicos de los españoles aumentó un 2,1% en 2023

15 marzo, 2024
NIQ revela que los hogares españoles incrementaron un 9,3% su gasto en bienes de consumo en 2023.

Los hogares españoles contuvieron su gasto en bienes de consumo tecnológicos, que incrementó solo un 2,1% respecto al año anterior, según los datos del nuevo Barómetro del Gasto en Retail de NIQ. Sin embargo, el comportamiento fue desigual en las distintas categorías de producto.

En este sentido, mientras que el gasto en equipamiento en tecnología para el hogar o el bricolaje descendió un 1,6% y un 1,7% respectivamente, sectores como el ocio, el mercado editorial y la óptica registraron subidas del 6,8%.

También, los electrodomésticos tuvieron un crecimiento del 3%, en un contexto donde los consumidores priorizan cada vez más substituir los artículos defectuosos en lugar de adquirir otros nuevos o actualizar los que funcionan. NIQ atribuye esta cifra a las bajas expectativas de ingresos y a la reducida propensión a comprar en los hogares, «unidos a una cierta saturación de artículos tecnológicos«.

En cambio, el sector de los pequeños electrodomésticos alcanzó un aumento del 7,6% en 2023 en comparación con 2022, y los consumidores estuvieron dispuestos a pagar un precio premium por «productos innovadores y multifuncionales«.

Por ejemplo, las freidoras experimentaron un incremento del 19,6%, gracias a la popularidad de las airfryers. Del mismo modo, las cafeteras crecieron en un 10,6% con el auge de las full automatic; los productos para el cuidado del cabello un 9,6% en los secadores y un 9,1% en los moldeadores; y las aspiradoras un 7,5%, gracias a las tipo escoba versátiles.

Gasto general en bienes de consumo

En cuanto al gasto general en gran consumo, productos duraderos y tecnología para el hogar en España, en 2023 ascendió a 142.700 millones de euros, lo cual supone un aumento del 9,2% en comparación con el año 2022.

Asimismo, este crecimiento en el gasto se debe a la subida de los precios de los productos de los sectores de alimentación y perfumería-droguería.

El mercado de gran consumo, afectado por la inflación

En este sentido, el fuerte incremento de los precios provocó que en 2023 los hogares españoles gastasen un 10,6% más que el año anterior en cubrir sus necesidades básicas de alimentación, cuidado del hogar y cuidado personal.

Sin embargo, los precios comenzaron a descender después del verano, lo cual facilitó la recuperación de la demanda. De este modo, en el último trimestre del año, todas las secciones salvo la del pescado fresco, cuyo consumo siguió cayendo como en trimestres anteriores, cerraron con datos de volumen en positivo.

Por otro lado, la alimentación envasada creció en valor por encima de los productos frescos, a causa de la tendencia a la sustitución de frescos por envasados, de más fácil preparación y consumo, así como al hecho de que los frescos experimentaron una subida de precios menor.

Entre los productos envasados, los refrigerados y congelados mantuvieron la tendencia positiva de los últimos años. Del mismo modo, la perfumería prolongó su evolución favorable, aunque de forma más moderada.

Además, la inflación afectó significativamente los presupuestos de los hogares, que se vieron obligados a adoptar medidas de ahorro como las promociones, la compra de marca de la distribución y el control del ticket. Igualmente, se siguió comprando más en proximidad, con visitas más frecuentes a las tiendas y compras de menor tamaño para controlar el gasto.

Según NIQ, de cara a 2024, el «principal reto« de los operadores del mercado, los fabricantes y los distribuidores será la recuperación del crecimiento en volumen, mientras se continúa moderando la evolución de los precios.

Tendencias del mercado

Patricia Daimiel, directora general para Iberia de NIQ, ha afirmado que «El Barómetro del Gasto en Retail de NIQ muestra que 2023 no fue un año fácil para el sector T&D. Sin embargo, los distribuidores de productos de gran consumo, como los supermercados, también están sintiendo los efectos de la creciente competencia por los presupuestos de los consumidores«.

«Para seguir siendo atractivos y competitivos en 2024, fabricantes y distribuidores tendrán que gestionar sus negocios de forma aún más fuerte y dinámica. Esto incluye también el diseño del surtido de productos. Como estrategia de crecimiento, puede ser útil ampliar la propia gama para incluir categorías prometedoras«, ha agregado Daimiel.

Por su parte, Michael McLaughlin, presidente de Global Retail en NIQ, ha señalado que «la dinámica del mercado y el comportamiento de los consumidores cambian cada vez más deprisa. En un entorno competitivo, los datos fragmentados y una dosis de intuición ya no son suficientes».

«Por eso utilizamos The Full View para ofrecer a nuestros clientes una comprensión exhaustiva, basada en datos, de la evolución del mercado y recomendaciones claras y procesables para el crecimiento futuro«, ha añadido McLaughlin.

*Para más información: https://nielseniq.com/

Sonitrón

15.03.2024