Según comunicó la dirección de Ericsson al comité de empresa, la decisión afectará a la plantilla ubicada en las áreas comercial y de servicios, mientras que las de I+D y soporte tecnológico no se verán afectadas. Sin embargo, la empresa no ha especificado en qué condiciones se hará el ajuste de plantilla y si los empleados podrán acogerse a un plan de bajas voluntarias o incentivadas.

Según ha informado la agencia Europa Press, la decisión de Ericsson se produce después de que la compañía encargara un informe a una consultora externa, que subrayó la necesidad de llevar a cabo una reorganización de la plantilla en un escenario de condiciones adversas en un mercado maduro.

Por su parte, Comisiones Obreras ha rechazado en un comunicado la decisión de eliminar el 6% de la plantilla en España por considerar que no había motivos económicos que justificaran la medida.

La filial española de Ericsson cerró el año pasado con una facturación de 954 millones de euros, lo que se traduce en un incremento del 5% respecto al 2006.

*Para más información: www.ericsson.com/es/