Estamos ante un televisor plano sumergible cuya aplicación no necesariamente tiene por qué ser tal. Es de gran utilidad para escenas en que el agua puede ser un riesgo para el aparato o los niños, como el jardín, un lugar que requiere especial atención por la lluvia, la piscina o incluso si el sistema de riego es automático.

De esta manera, no es necesario estar al tanto de estas circunstancias para así centrarnos exclusivamente en los ratos de ocio. Resulta útil en otros lugares como el baño o la cocina.

Otra característica que llama la atención es que no necesita cables, lo que evita muchas limitaciones y mejora la movilidad.

Ofrece una imagen nítida, brillante y de colores reales con tecnología LCD clase "A" de 15,4 pulgadas, formato panorámico 16:9 con carcasa plástico antigrasa y resistente al agua (según norma IP-65). Su peso es de 4,5 kg con una gran facilidad de uso y transporte.

Brinda una imagen en alta resolución (1280 x 800); con sistema antireflejos con un ángulo de visión de 80°/80° (horizontal, l/r) y 70° / 70° (vertical, u/d). Se alimenta mediante batería estanca de lithium polymer con 2,5 hrs de autonomía en reproducción continua con carga completa.

* Para más información: www.saytes.es